El Reino de León como Estado: Años 910 a 1230

 

Corría el año 910 cuando Alfonso III de Asturias fallecía en la ciudad de Zamora, dejando su reino dividido entre sus hijos: al primogénito, García le legó el Reino de León, a Ordoño Galicia y a Fruela Asturias. Esta división duraría poco ya que cuatro años más tarde moriría García I, siendo proclamado rey de León su hermano Ordoño, en adelante Ordoño II de León, que fijaría la sede de su unificado reino de León y Galicia en la ciudad de León. Su reinado comenzaría con una campaña militar en que llegará hasta Mérida (Badajoz) sometiéndose a los leoneses los gobernadores emeritenses así como los de la ciudad de Badajoz. Esto haría reaccionar a los musulmanes que atacarán a Ordoño II pero serán derrotados de manera aplastante por el ejército leonés en la batalla de Castromoros, tras la cual, y viendo el poderío del Reino de León, acudirán a Ordoño II castellanos y navarros suplicando su ayuda para parar el acoso al que los musulmanes les estaban sometiendo. El rey leonés aceptará darles esa ayuda, reconquistando para ellos Arnedo y Calahorra. Pero esto irritará a los musulmanes que derrotarán a los leoneses en la batalla de Mutonia, anunciando la Guerra Santa más tarde y atacando de nuevo Navarra y Castilla, en ayuda de las cuales acudirá de nuevo el Reino de León, pero navarros y leoneses serán derrotados en la batalla de Valdejunquera al no acudir a la batalla los condes castellanos, a los que tras esta traición a leoneses y navarros Ordoño II mandará apresar, si bien al poco tiempo se apiadará de ellos y los pondrá en libertad. A su vuelta de dichas expediciones encontrará a su esposa la reina Elvira recién fallecida en Zamora, muriendo el propio Ordoño tres años después aunque dándole tiempo aún a una última campaña conjunta con el rey Sancho Garcés de Navarra contra los musulmanes, a los que derrotará en La Rioja. Ordoño morirá en el 924 ocupando el trono su hermano Fruela (hasta entonces rey de Asturias) unificándose bajo éste los reinos de León, Galicia y Asturias en una misma Corona, si bien este rey fallecerá al año siguiente con el único logro desafortunado de perder la alianza con los reyes de Navarra.

 

Pero si el paso de Fruela II por el trono leonés fue efímero más aún lo fue el de Alfonso Froilaz que no duró ni un año al frente del Reino de León, debiendo refugiarse en Galicia, convirtiéndose en su rey separando de nuevo a Galicia de la Corona de León. Tras esta serie de despropósitos llegó al trono Alfonso IV de León, que recuperará en el 929 a Galicia para la Corona Leonesa sin que hubiese oposición a ello por parte de los gallegos. Pese a ello Alfonso IV abdicará de la Corona Leonesa en Zamora cediendo el trono a su hermano Ramiro.

 

Ramiro II reconquistará Salamanca, Ledesma y Guadramiro entre otras poblaciones

 

Comienza de esta forma el reinado de uno de los reyes leoneses más importantes, Ramiro II, que se trasladará desde Viseu (Portugal) hasta tierras leonesas, preparando desde Zamora el ataque a las tropas musulmanas, habiendo rehecho la alianza entre León y Navarra, reconquistando para la Corona Leonesa momentáneamente Madrid y Toledo, lo que provocará la reacción musulmana que atacará a Ramiro II, si bien el ejército leonés-navarro les derrotará en Osma y en Zaragoza. El califa Abderramán reaccionará reconquistando Zaragoza para los musulmanes, pero Ramiro II promoverá una gran alianza entre León, Navarra y Aragón para derrotar a los musulmanes, lo que logrará en la batalla de Simancas en el 939, así como en la batalla de La Maya el mismo año. De este modo los reinos cristianos avanzaron, bajando la frontera leonesa hacia el sur, entrando a formar parte del Reino de León ciudades y villas como Salamanca, Ledesma, Guadramiro o Peñaranda de Bracamonte. Pero todo esto no logrará una mayor unidad entre los cristianos, sino que los castellanos encabezados por su conde Fernan González se levantarán contra el Reino de León, teniendo que hacer frente Ramiro II a los afanes independentistas del condado de Castilla, venciendo a los rebeldes y apresándolos, si bien les liberará al jurar estos fidelidad al Reino de León, aunque al volver a Castilla estos romperán con la palabra dada, lo que debilitará al Reino de León y favorecerá el ataque de los musulmanes a tierras leonesas dándose además una alianza entre los castellanos y los musulmanes. El rey Ramiro morirá a la vuelta de su última expedición tras partir a ella desde Zamora y derrotar a los musulmanes en Talavera, siendo sustituido por Ordoño III, si bien tras él se llegará a un período de paz pactada con los musulmanes, el cual se romperá tras Ramiro III de León el cual llegará a enfrentarse incluso a los vikingos, así como a las tendencias separatistas de castellanos y gallegos, si bien quien más sufrió los ataques musulmanes fue Bermudo II, al que Almanzor mantuvo en jaque su corona.

  

Tras los ataques de Almanzor llegará al trono leonés Alfonso V, que redactará el Fuero de León en el 1017 siendo ésta la primera recopilación foral de la Península Ibérica, y convirtiéndose en la base para el resto de fueros del Reino de León. Cabría destacar aquí que una gran cantidad de historiadores consideran el Fuero de León como la primera recopilación del mundo de los derechos fundamentales de las personas.

El Reino de León en el año 1030

 

Pero uno de los hechos trascendentales en la historia del Reino de León sucederá en el año 1065 en que tras los brutales ataques de Castilla sobre León tan sólo resistirá a los mismos la que era capital de facto del Reino de León, Zamora, concentrándose en ella el grueso del ejército leonés y superando un asedio de meses, que acabará tras la muerte del rey castellano Sancho por parte del zamorano Bellido Dolfos en complicidad con Doña Urraca. Con el acto de Bellido el Reino de León seguirá en pie abriéndose además con Alfonso VI de León el período en el que el Reino de León se convertirá tras la bendición del Papa de Roma en Imperio en 1077, siendo la Corona Leonesa suprema sobre el resto de reinos peninsulares y parte de los del sur de Francia, coronándose los reyes leoneses como emperadores de Hispania. Alfonso VI además casará a una de sus hijas con Raimundo de Borgoña, a quien encomendará la misión de una nueva repoblación de las tierras de la actual provincia de Salamanca. Es bajo su reinado, además, en 1098, cuando se crea el escudo del Reino de León, siendo el símbolo heráldico de un reino más antiguo de Europa. Pero el período de mayor expansionismo territorial del Imperio Leonés se dará con Alfonso VII, época en que el Reino de León abarcará aparte de a la Región Leonesa a Galicia, Asturias, Castilla, País Vasco, parte de Extremadura así como Portugal, si bien este último se independizará en 1143 de León convirtiéndose en el Reino de Portugal aunque mantendrá su vasallaje respecto al Reino de León, al igual que Navarra, Aragón, Cataluña y los ahora distritos franceses de Languedoc, Provenza y Rosellón, situados en el conocido como “Golfo de León”.

 

Sea como fuere lo cierto es que esta idea de emperadores de Hispania que poseían los reyes leoneses será la que ponga las bases para la idea de unificación peninsular y, por tanto, la base para la creación de España.

 

Tras Alfonso VII llegará al trono un rey clave para Ciudad Rodrigo, Fernando II de León, quien conquistará casi la totalidad de Extremadura para el Reino de León y firmará la paz con el rebelado Reino de Portugal. Bajo su reinado se dará en Zamora el afamado “Motín de la Trucha” que supondrá una revolución del pueblo llano contra los nobles de la ciudad, a buena parte de los cuales quemará encerrándolos en una iglesia, exigiendo la nobleza zamorana que no pereció la cabeza de aquellos que se rebelaron contra ellos, pero Fernando II abogará en favor del pueblo llano y les quitará los títulos a los nobles, los cuales abandonarán Zamora dirigiéndose al vecino Reino de Castilla. En otro orden de cosas, Fernando II de León será quien haga una nueva repoblación de la actual provincia de Salamanca y otorgará a Ciudad Rodrigo la cabeza de un obispado, lo que le hará mantener no pocas tensiones con los obispados de Zamora y Salamanca, a las cuales hará frente y confirmará a la antigua Miróbriga (Ciudad Rodrigo) como sede episcopal.

 Fernando II creará el obispado de Ciudad Rodrigo

 

Pero si Fernando II fue importante para Ciudad Rodrigo para Salamanca lo será Alfonso IX de León, que será quien funde la Universidad de Salamanca en 1218, institución clave en el devenir de la ciudad salmantina desde entonces. Pero internacionalmente lo que dará fama a Alfonso IX será que éste será quien convoque las primeras Cortes del mundo con representación del pueblo llano en 1188, modelo que más tarde será tomado por el resto de países españoles así como por los europeos. En estas Cortes Leonesas se debatirán por primera vez en la historia temas tan importantes como la inviolabilidad del domicilio, la del correo, la necesidad de convocar Cortes para declarar la guerra o firmar la paz, así como garantizándose una gran cantidad de derechos tanto individuales como colectivos, limitándose así los abusos de poder de nobles y rey, sentando las bases para la futura democracia. En estas Cortes habrá representantes, entre otras, de ciudades y villas del Reino como Salamanca, Ledesma, Ciudad Rodrigo, Toro, Zamora, León, Oviedo o Benavente.

 

A Alfonso IX se le complicará el reinado tras los ataques que recibirá desde el este por parte del Reino de Castilla y desde el oeste por el de Portugal. En estos años los castellanos invadirán los llamados “Campos Góticos”, que serán clave para que el Reino de León no acuda de manera oficial a la batalla de las Navas de Tolosa, cuando aprovechará para recuperarlas para sí. La situación con Portugal, por su parte, tendría una solución más fácil, casándose el monarca zamorano con la hija del Rey de Portugal, la cual fallecería al poco tiempo de dicha boda.

 

Otro de los elementos importantes del reinado de Alfonso IX será la conocida como “Liga de Huesca”, que supondrá un pacto entre todos los reinos cristianos peninsulares salvo el de Castilla, firmándolo, por tanto, Portugal, León, Navarra y Aragón, acercándose así sobremanera las posturas entre estos cuatro reinos hispanos, si bien esto se rompería tras la excomunión del rey leonés por el Papa al haber firmado el monarca un pacto de paz con los musulmanes, lo que llevará a que Portugal vuelva a atacar al Reino de León, al igual que Castilla. El Papa intentó mediar entre León y Castilla, firmándose un pacto entre ambos reinos por el que el rey leonés se debía casar con la hija del rey castellano y éste debía devolver las ciudades leonesas de los “Campos Góticos” al Reino de León, si bien este pacto sólo lo cumplió el rey leonés que ante el incumplimiento castellano citó a su monarca en Toledo para pedirle la devolución de dichas plazas, si bien el rey castellano se negó, debiendo recuperar más tarde Alfonso IX por la fuerza dichas villas para el Reino de León. Alfonso IX murió en 1230 tras haber concedido una buena cantidad de fueros (siendo uno de los últimos que concedió el de Cáceres), habiendo repoblado varias comarcas del Reino y fundado La Coruña.

 


Alfonso IX creará la Universidad de Salamanca

 

Alfonso IX fue un gran cultivador de las letras y como consecuencia de ello creó la antes citada Universidad de Salamanca, que resultaría ser el Estudio General del Reino de León y se creará con el fin de que los leoneses no tuviesen que emigrar a estudiar al vecino Reino de Castilla, a sabiendas de la tensión que se daba entre ambas coronas. El hecho de que este Estudio se crease en Salamanca y no en Santiago de Compostela creó un cierto nivel de tensiones entre la nobleza gallega y la leonesa, si bien el rey leonés se mantuvo firme en su idea inicial de que la universidad radicase en Salamanca.

 

CJSF